La alfombra roja fue testigo de looks de alto impacto donde también se lucieron Selena Gómez y Pedro Pascal.
Las mayores estrellas de la televisión caminaron por la alfombra roja este domingo bajo un brillante sol de septiembre para los premios Emmy, el primero de muchos eventos que marcarán las tendencias de la moda rumbo a los Óscar.
Jenna Ortega fue, sin lugar a dudas, la más impactante de la noche. Usó un total look de Givenchy con top de cristales y perlas en distintos tamaños con una falda recta con tajo.


Selena Gomez, quien protagoniza “Only Murders in the Building”, llegó del brazo de su prometido, el productor musical Benny Blanco, con un vestido rojo largo sin mangas firmado por Louis Vuitton con tajo y cola amplia.

Sydney Sweeney, la estrella de “Euphoria” presentó uno de los premios y deslumbró con un impresionante vestido también rojo, con escote pronunciado y diamantes en su collar.

Pedro Pascal, nominado a mejor actor dramático por “The Last of Us”, se lució con un ambo de saco cruzado color crema, lentes de sol y una incipiente barba.

También apostaron a los colores claros Scarlett Johansson con un strapless de línea sirena y Michelle Williams con un modelo más romántico en off white, de línea griega, strapless con efecto drapeado en el escote y volados.


Accesorios con mensaje político
La guerra en Gaza ciertamente estaba en la mente de algunos asistentes a los Emmy.
Megan Stalter, una de las estrellas revelación de “Hacks”, llegó casual con una camiseta blanca y jeans… aunque su bolsa habló por su pinta con el mensaje “¡Cese el fuego!” escrito sobre una cinta adhesiva blanca. Y Javier Bardem, nominado a mejor actor de reparto en una miniserie por “Monstruos: La historia de Lyle y Erik Menéndez”, llevaba una kufiya palestina blanca y negra con detalles rojos y verdes alrededor del cuello.

“Soy el único, pero no soy el único. Mucha gente me está dando su apoyo en susurros, y yo digo, no susurres, dilo en voz alta”, comentó el actor español sobre su respaldo a los palestinos, en rechazo a lo que llamó un “régimen de apartheid” israelí, al ser preguntado por periodistas sobre su kufiya.