César Luis Collado, fiscal de Investigación Penal 1 de Sáenz Peña, imputó a tres policías del Chaco por presunto cohecho. Se sospecha que el viernes, en un procedimiento vial sobre Ruta Nacional 16, kilómetro 500, los uniformados pidieron el dinero a un camionero oriundo de Salta.
Fuentes cercanas a la causa confirmaron a Periodismo365 que este lunes la Justicia imputó a tres efectivos de la Policía del Chaco por el presunto delito de cohecho, tras la denuncia de un camionero salteño que afirmó haber sido extorsionado en un control policial en la zona de Charata. Los imputados pertenecen a la Policía Caminera y, según la denuncia, habrían exigido coimas en dólares.
Según detallaron las fuentes, el hecho ocurrió el viernes 4 de abril sobre la Ruta Nacional Nº 16, a la altura del kilómetro 500, en el límite entre Chaco y Salta. Allí, personal de la Policía Caminera de Charata realizó un procedimiento encabezado por el subcomisario Walter Hugo Oksentiuk, jefe de Patrulla Vial, acompañado por los sargentos primero Juan Carlos Páez y Pedro López.
A las 15:30, los efectivos interceptaron un camión Mercedes Benz con acoplado Ombú, conducido por L.J.M.V., de 18 años, domiciliado en General Güemes, Salta. Tras detectar irregularidades en la Carta de Porte de la carga de trigo, procedieron al secuestro del vehículo, que fue trasladado a la Comisaría de Taco Pozo y quedó a disposición de la Agencia de Recaudación y Control Aduanero (ARCA).
Horas más tarde, O.A.E., de 26 años, empresario del transporte domiciliado en Salvador Mazza, denunció ser el propietario de la carga. Relató que el sábado 29 de marzo había cargado 37.000 kilos de trigo en Bandera, Santiago del Estero, y que el viernes 4 de abril su camión circulaba por la zona de Taco Pozo cuando fue detenido en un control policial.
La extorsión
El denunciante explicó que los uniformados se identificaron como miembros de la Policía Caminera de Charata y, tras solicitar la documentación correspondiente, señalaron que la Carta de Porte presentaba irregularidades. Posteriormente, uno de los policías se habría acercado al chofer del camión y, con tono sugerente, le preguntó “cómo quería arreglar”, sugiriendo que avisara antes de consultar con alguien más.
El chofer pidió tiempo para hablar con la dueña de la carga, pero poco después fue obligado a estacionar en la banquina. Luego, los policías le informaron que el camión sería secuestrado. En ese momento, el conductor pidió evitar la retención del vehículo. Uno de los agentes le respondió que no alcanzaría la suma que él pretendía “porque desde el principio estaba llorando”. Cuando el chofer preguntó cuál era el monto exigido, le respondieron: “mil dólares”.
El camionero les ofreció los 400 dólares que tenía encima, pero le dijeron que era poco. Para completar el soborno, entregó otros 100 dólares, sumando un total de 500 dólares en billetes de la cotización informal (“blue”). Según su relato, el dinero fue recibido por dos de los policías, uno de ellos de mayor tamaño y edad. Aun así, los efectivos exigieron otros 500 dólares, por lo que el joven tuvo que viajar hasta Las Lajitas, en la provincia de Salta, para conseguir el resto del dinero. Este viaje lo realizó en otro camión conducido por un amigo.
Amenazas y advertencias
Durante el intercambio, los policías le advirtieron al camionero: “Ojo con el teléfono, cuidado con lo que hacés. Manejo toda la zona de Charata, Taco Pozo, Río Muerto y Gancedo”, en un claro intento de intimidación.
El denunciante indicó que logró llegar a Las Lajitas alrededor de las 18:30, donde su tío lo trasladó nuevamente a Taco Pozo. Para ese entonces, el camión ya se encontraba secuestrado en la comisaría local.
Tras la denuncia, el fiscal de Investigación Penal Nº 1 de Presidencia Roque Sáenz Peña, Dr. César Luis Collado, ordenó recibir declaración testimonial a los testigos y notificó la imputación en libertad a los tres efectivos policiales por el delito de “supuesto cohecho”.
Fuente: Periodismo 365